jueves, 21 de julio de 2016

Conexión galáctica

Hace unos días leyendo un fragmento el libro Contacto de Carl Sagan, comencé a pensar en esa conexión tan especial que ha habido siempre entre el hombre y el resto del universo, aun cuando hemos intentado apartarnos de esa madre nuestra que es Gaia y darle la espalda a nuestros antepasados, ignorando el hecho de que todos somos polvo de estrellas, esa conexión que nos mantiene unidos al resto de criaturas vivientes y no vivientes que ocupan el universo sigue vigente aunque muchos no quieran admitirlo, pero ¿Por qué separarnos de tanta grandeza? Al intentar lucir más grandes renunciamos a la dimensión de lo infinito, tratando de disfrazarnos de dioses y únicos dueños de todo lo existente, cuando simplemente somos una partícula más, una ficha en el rompecabezas, probablemente la más innecesaria.

Pero el caso no es analizar el fragmento sino contarles las reminiscencias que tuve al leerlo, pues vinieron a mi mente varios momentos en los que yo misma he sentido esa conexión absoluta con el universo, algunas de estas experiencias se remontan a mi infancia, cuando me acostaba en una cobija en la terraza de mi casa a observar las estrellas junto a mis hermanos, muchas noches esperamos en vano ver estrellas fugaces que el cielo iluminado de la ciudad y la nubosidad nunca nos permitieron observar. Pero sí hubo una ocasión en la que vi estrellas fugaces por montones, se precipitaban desde las alturas y parecían lanzarse sobre nosotros, esto sucedió en un campamento de los scouts, en un lugar completamente encantado donde la noche se podía percibir con todo detalle, jamás olvidaré la cantidad de estrellas que vi suicidarse, ni todas las historias que viví allí, quizás algún día se las cuente...

La última ocasión que vino a mi mente fue mucho más reciente, apenas a finales del año pasado, cuando acostada en Sapzurro junto a quien en ese momento era mi pareja, observamos la inmensidad del firmamento y pudimos presenciar también las estrellas, incluso juntarlas como puntos para crear figuras con ellas, en el cielo descubrimos todo un entretenimiento primitivo en un paraíso como Sapzurro lejos de la contaminación tecnológica de las ciudades, allí conectamos con el universo muy cerquita de la brisa y del sonido del mar... Las tres son experiencias para nunca olvidar ¡Conectate con el cielo! Es totalmente gratis y te va a traer muchísima felicidad :)